Sergio, un joven chef originario de la región, es un ejemplo de cómo la pasión puede cambiar el rumbo de una vida. Aunque se define como un cocinero aún en sus primeros pasos, tiene claro que la experiencia no es el único ingrediente clave en la cocina.
Inicialmente, Sergio estudió derecho durante cinco años en Santiago, pero antes de la pandemia, su interés por la gastronomía comenzó a crecer. Decidió seguir su instinto y estudiar cocina. Junto a Carolina, su compañera y ahora socia, viajó al extranjero, donde tuvo la oportunidad de cocinar en el prestigioso restaurante Geranium de Copenhague. De regreso a Chile, trabajó en Boragó, y más tarde, se trasladó a Bogotá para sumarse al equipo de El Chato, bajo la dirección de Álvaro Clavijo. Cada una de estas experiencias no solo amplió su visión culinaria, sino que también le permitió formar valiosas conexiones.
Antes de embarcarse en la apertura de Ephedra Restaurant, Sergio tenía planes de viajar a Perú. Sin embargo, al recibir la oferta de instalar su restaurante en un lugar estratégico, no lo dudó y decidió quedarse.
Por su parte, Carolina es oriunda de Rio Grande, una localidad situada a 50 km de San Pedro. Criada en un entorno rural, su infancia estuvo marcada por un profundo contacto con la naturaleza y los paisajes de la región. Más adelante, estudió ecoturismo y trabajó como guía en un reconocido hotel de la zona. Su dedicación y profesionalismo siempre la han distinguido, cualidades que Sergio admira desde el primer momento en que se conocieron.
Sin duda, podríamos afirmar que sin Carolina, Ephedra no existiría.
Conexión personal con el lugar
Sergio, ¿Qué te conectó tan profundamente con San Pedro de Atacama y cómo esta conexión se refleja en la propuesta gastronómica de Ephedra?
Visión culinaria: a través de la comida me he podido reencontrar con mis raíces y apreciarlas más.
¿Cuál era tu visión al crear Ephedra con tu socia?
Nuestra visión era generar un restaurante distinto, con comida distintas y una propuesta auténtica. Se trata de entregar más que solo comida, es dar una experiencia que enriquezca al comensal y lo invite a conectarse con el territorio.
¿Qué querían lograr con este proyecto gastronómico en un lugar tan especial como San Pedro de Atacama?
Inspiración inicial: queríamos mostrar que en el desierto de Atacama también es posible hacer excelente comida sin perder identidad.
Buscamos que la gente viaje a San Pedro también por motivos gastronómicos, y en cierta parte lo estamos logrando, mucha gente de localidades como Antofagasta, Iquique o Calama, viaja exclusivamente a comer en el restaurante y eso nos llena de una manera inefable.
¿Qué fue lo que los impulsó a explorar la cocina atacameña y a convertirla en el corazón de su restaurante?
Principalmente nuestra identidad. Puedo decir que muchas veces olvidé o dejé de lado mi cultura, si embargo, a medida que empecé a usar ingredientes de acá, me fui conectando de una manera más especial con mis raíces y mi identidad, de la cual hoy sí me siento parte y siento cierta responsabilidad.
¿Cómo te inspiras en el proceso creativo?
Es difícil decirlo, las ideas llegan de la manera menos pensada, pero siempre tomo notas y a medida del tiempo voy trabajando en ellas.
¿Compartes recetas, ideas o experiencias que influyen en el menú?
Nuestro servicio es un diálogo con el comensal y siempre buscamos explicarles qué hay detrás de cada plato. Me gusta mucho cuando preguntan y podemos profundizar más en la comida
Enfocándose en la innovación
¿Cómo surgió la idea de fusionar las tradiciones culinarias ancestrales de Atacama con técnicas y presentaciones más contemporáneas?
Durante mis estadías en el extranjero, aprendí mucho, llegue incluso a trabajar con caviar y productos de mar que son considerados lo mejor (vieras, langostinos, etc). Sin embargo, me empezó a gustar la idea de hacer algo más extremo y cocinar sin aquellos ingredientes y ceñirme al territorio, dándole un giro, obviamente.
Es por ello que no concibo cocinar con caviar, foies gras, vieras o cualquier otro producto que no se obtenga en la región. Usamos solo un producto de mar y esperamos incluirlos según conozcamos al productor.
¿Qué te motivó a buscar esta innovación en la cocina?
Simplemente la motivación de afrontar un desafío en el que tuviésemos que arreglárnoslas con lo que existe en el territorio y no traer cosas de afuera ni mucho menos importar.
Complementariedad
¿Quién se encarga de qué área específica (cocina, administración, relaciones públicas, etc.)?
Somos sólo Carolina y yo, así que hacemos de todo un poco. Carolina ve la parte administrativa y yo me encargo del área de relaciones y cocina. Por supuesto que siempre buscamos asesoría cuando lo necesitamos.
¿Cuántas personas son parte de Ephedra Restaurant?
Actualmente 7.
Reservas
Teléfono: +56 9 7370 4298
E-mail: contacto@ephedra.cl
Dirección: Ayllu de Poconche (Espacio Pirka), San Pedro de Atacama, Chile.